Solo cuando se piense realmente en los derechos fundamentales del ser humano y se establezcan medidas que conlleven a la igualdad de oportunidades y a la dignificación humana, Medellín podrá salir de este flagelo de inequidad social.
A largo plazo se pueden evidenciar los frutos de los cambios que se hagan en este momento como una mejor distribución del presupuesto de la ciudad, haciendo énfasis en la educación, en el bienestar y en el acceso a oportunidades laborales con equidad.
Las acciones políticas deben enfocarse al trabajo de la convivencia, en la construcción de modelos educativos sociales, donde la comunidad se sienta participe y se haga responsable de sus propios cambios estructurales.
A nivel del empleo es importante crear un banco de oportunidades para emprendedores, pero con apoyo para el mercadeo a nivel internacional y poder así generar cambios impactantes por la movilización de bastante personal.
Se deben crear redes de apoyo a las personas en situación de extrema pobreza , para que se les asignen recursos que garantice su alimentación, vivienda y salud como elementos básicos para la vida.
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